domingo, 23 de diciembre de 2012

Silverpilen, el Tren Plateado Fantasma



Vivimos en un mundo plagado de leyendas urbanas, y muchas de ellas relacionadas con lo paranormal. Dentro del imaginario colectivo, los barcos fantasmas son un habitual, así como los trenes fantasma. Pero, ¿qué me decís de un Metro fantasma?

En Estocolmo existe, y se llama "Silverpilen", nombre que le da su aspecto metálico de aluminio brillante. Se trata pues, del único tren de toda la línea que no se pintó de verde como el resto y se dejó con ese característico color con el que venía "de fábrica" por así decirlo. Ya entonces, (estamos hablando de los años 60), se hacía raro entre los pasajeros verlo, puesto que sólo se utilizaba en determinados días de mucha afluencia de pasajeros para dar apoyo en la línea. Un tren de un color diferente, que llamaba tanto la atención y que rara vez podía uno verlo... eso es carne de convertirse en generador de leyendas urbanas.

Al parecer ya en los años 80, con el tren aún en circulación (a día de hoy está retirado), empezaron a escucharse las primeras habladurías, puesto que trabajadores de la línea aseguraban haberlo visto circular de madrugada, fuera de los horarios del metro, o incluso en líneas que estaban cerradas desde hacía años. Éste fue el inicio de la leyenda de Silverpilen.


Naturalmente, para que una leyenda como ésta alcance su máximo apogeo, necesitaba que el tren fuera sacado de circulación por obsoleto, cosa que sucedió en los 90. A partir de entonces, los relatos de gente que aseguraban haberlo visto pasar, entraban ya de lleno en las historias de fantasmas de Estocolmo. Cabe decir, que en la línea donde aparece el Silverpilen existe también una estación fantasma. Se trata de la estación de Kymlinge, cuya construcción nunca se terminó, y por tanto no se abrió al público. Por aquí pasan todos los metros de la línea sin detenerse, aunque no es el caso del Silverpilen. Según la leyenda local, este Metro plateado fantasma sólo tiene una parada, que es la de Kymlinge, donde suben y bajan pasajeros espectrales.


Sería genial que los responsables de la línea restauraran el auténtico Silverpilen e hicieran con él viajes tematizados en determinadas noches del año, fuera del horario normal de circulación, como se hace en algunos países con trenes históricos. Así el Silverpilen volvería a la circulación, y esta vez sus supuestos pasajeros fantasma compartirían vagón con los habitantes de Estocolmo y los turistas en busca de aventuras.

CANCIÓN DEL DÍA: OZZY OSBOURNE - CRAZY TRAIN