domingo, 29 de noviembre de 2009
Cazadores de Fantasmas
Me he cansado de los fantasmas. De los dos: los de la sabanita blanca con cadena y de los que aseguran que los tienen en casa. Porque mucha gente parece haber sustituido el tamagotchi o el gusiluz por un ente paranormal. ¿Cosas de la edad? Quizás…
Cuando era pequeño solía tener problemas en la escuela cuando me descubrían las revistas que llevaba ocultas en la carpeta. No se trataba de la penthouse, no… eran ejemplares de “Más Allá” o “Enigmas”. No es que creyera que estábamos rodeados de sucesos paranormales, pero siempre he sido muy curioso y temas como la civilización atlante o la construcción de las pirámides siempre han atraído poderosamente mi atención. Pero claro, si en un colegio religioso te cazan con una revista en cuya portada aparece el nombre de un artículo sobre ritos satánicos, pues te metes en un lío.
Y fue mi interés y mi curiosidad por todo esto lo que me llevó a investigar todas las posturas antes los fenómenos extraños. A través de mi vinculación con la magia (la de chistera y conejo, no la de la Bruja Lola), fui familiarizándome poco a poco con conceptos como la sugestión, la autosugestión y el más divertido: la sugestión colectiva. En sexto de primaria conseguí hacer creer a la mitad de mi clase que el gimnasio del colegio estaba encantado. Llegó un punto en que algunos compañeros me relataban “experiencias” que no tenían nada que ver con las que yo preparaba y empecé a preguntarme cuántos de los sucesos que aparecían en las revistas no habrían sido obra de la sugestión, como había pasado en mi clase. Al menos todos tenemos recuerdos muy divertidos, corriendo por los pasillos del gimnasio como alma que lleva el diablo…
Con los años me fui volviendo cada vez más escéptico. Como decía antes, de repente se puso de moda tener poderes, creerse ser capaz de adivinar el futuro o compartir casa con Casper. Haced memoria. Seguro que tenéis más de un amigo que vive envuelto en lo paranormal. Y eso me mosquea. No es que no crea que puedan ocurrir cosas fuera de lo común; yo mismo he experimentado un par de sucesos a lo largo de mi corta vida para los que no tengo explicación, pero si todo el mundo que cree ver “cosas” las viera, estaríamos viviendo en el mundo de La Historia Interminable, y nada nos impediría irnos de copas con trasgos o cantar en un karaoke con el Yeti.
¿Pasan cosas que escapan a la comprensión de la ciencia? Sí, pasan. Pero no a todas horas en todas partes. Es un poco como el avistamiento de OVNIS. Si todos los casos documentados fueran reales, la Tierra sería un área de servicio intergaláctica.
Volvamos a la magia de frac y chistera, a la que me dediqué durante algunos años. Una de las grandes figuras fue el gran Harry Houdini, famoso escapista que era capaz de escabullirse de cualquier tipo de atadura o cerrojo. Houdini tenía la certeza de que en la antigüedad la Magia, era una sola. ¿Cuántos magos no habrán sido quemados en hogueras por realizar juegos como el de los cubiletes? Tengamos en cuenta que los objetos de trucos de magia más antiguos encontrados datan del Antiguo Egipcio… Según la teoría de Houdini, en algún momento durante el 1800 la Magia se escindió en dos corrientes: por un lado, los magos que creían que lo que hacían era una disciplina artística que debía ser llevada a los escenarios para disfrute de sus conciudadanos. Por otro lado, los que creyeron que debían aprovecharse del analfabetismo imperante para ganarse la vida engañando. Así nacieron los espiritistas.
Algunos de los ardides empleados eran muy ingeniosos: ¿alguna vez habéis visto una proyección sobre una cortina de agua? Es algo muy bonito, aunque hoy día no engaña nadie. En aquel entonces sí lo hacía; el truco consistía en una linterna mágica (el antepasado del proyector y del cine), con la que proyectaban fotografías de los fallecidos sobre una cortina de humo que procedía de un brasero encendido. El mismo humo daba la sensación de movimiento necesaria para que el engaño surtiera efecto. Y claro, el inocente cliente, caía de pies juntillas. Para empezar, inventos como el de la linterna mágica sólo se conocían en círculos culturales muy reducidos. Y sólo hay que pensar en la reacción de los espectadores que vieron por primera vez una proyección del cinematógrafo Lumiére en la que un tren de vapor se acercaba a la cámara: todos salieron despavoridos del cine, creyendo que el tren les iba a aplastar. Es normal: no conocían esas tecnologías.
Houdini dedicó gran parte de su vida a una cruzada contra los espiritistas, desenmascarando a uno tras otro. Cuánto le echo de menos cada vez que veo a personajes como Aramis Fuster o Paco Porras haciendo monerías por televisión.
Hasta aquí mi manifiesto del crédulo que se volvió incrédulo. Ahora, haré como hizo Descartes: negar toda existencia para después poder demostrarla. Hoy día estoy enganchado a un programa de televisión que dan en Buzz los lunes, de 14:00 a 15:00 (¡¡¡momento publicidad!!!). Se llama “Los Cazadores de Fantasmas” (Ghost Hunters).
Se trata de una asociación llamada TAPS (The Atlantic Paranormal Society) creada por Jason Hawes y Grant Wilson. Ambos, fontaneros de profesión, tuvieron en el pasado algunas experiencias fuera de lo común para las que no encontraban respuestas. Buscaron esas respuestas en los grupos paranormales existentes del momento, pero les pasó lo mismo que a mí: un desencanto absoluto; todo el mundo tenía un fantasma en casa, todo el mundo era medium, todo el mundo había visto la cara de Jesús en una loncha de mortadela con olivas…
Así que decidieron fundar TAPS, el que sería el primer grupo de investigación paranormal con una mentalidad completamente opuesta. Cuando los miembros de TAPS van a investigar un caso, lo hacen pensando que NO ocurre nada paranormal. Utilizan equipamientos de última tecnología, graban horas de audio y video y tratan de reunir todas las pruebas posibles. Después las analizan. La mayoría de las veces, no consiguen absolutamente nada. Eso es lo bueno del programa: ver como de veinte supuestos casos de lugares encantados, en quince no hay nada que se salga de lo común. En otras ocasiones, sí captan imágenes o sucesos a priori inexplicables. Otras asociaciones de este tipo, lo que hacen es colgar videos como esos diciendo: ¿véis? ¡Esta puerta se abre sola! ¡Aquí se manifiesta el espíritu de Konrad Von Mansfield! Ellos no; ellos tratan de desmontar eso. Le darán todas las vueltas posibles hasta encontrar la explicación lógica al suceso. Y muchas veces también lo consiguen. Es el caso de una pareja que creía que había un fantasma en su casa, que cuando llegaban con las dos manos cargadas de bolsas de la compra les abría la puerta del salón. Después de muchos experimentos, comprobaron que, cuando venían cargados, cerraban la puerta de la entrada con más fuerza (con el pie), y la vibración de las paredes de madera abría la puerta del salón; es un poco como Los Cazadores de Mitos, pero con sucesos paranormales.
Pero como sabéis, a veces los Cazadores de Mitos demuestran que algunos de esos mitos son reales. Esos son los mejores momentos de Ghost Hunters, cuando graban una imagen que no son capaces de explicar. De nuevo la ética se impone; las cuelgan en su web para que la gente opine, tanto los crédulos como los escépticos. Y muchas se quedan sin resolver. Éstas son algunas de las mejores imágenes que han conseguido a lo largo de los años:
¿Lo que más me gusta de los Ghost Hunters? Nunca aceptarán ningún tipo de dinero por una investigación; es el equipo quien corre con los gastos. ¿Véis alguna diferencia con el señor que dice haber hecho Vudú con Cristiano Ronaldo? Quizás sólo algunos miles de euros… al final me haré chamán. O político, que también parece ser un chollo… pero de esto, hablaremos otro día.
Imágenes: Snorf
Spec
Miss Heroin
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A mi el tema de los fantasmas y los entes paranormales siempre me ha dado un poco de yuyu... recuerdo cuando era pequeña que mi padre veía un programa que daban en la 2 que hablaba de estos temas. Lo mejor es que lo grababa (lo daban por la noche) y nos lo hacía ver a la hora de comer, con lo que luego yo tenía pesadillas (me daba miedo hasta el Quién sabe dónde xD)
ResponderEliminarY por lo de la sugestión colectiva, en mi caso lo que todos los niños de mi clase veían eran fantasmas en una Masia dónde íbamos a hacer la castanyada. No veas la de manos que se veían por la ventana, la de sangre en los pozos que vio todo el mundo... luego no había quien quisiera ir a celebrar la castanyada!
se que los espiritus existen porque e sentido su presencia aunque no lo pueda demostrar me asustan pero se que lo tengo que afrontar me costaba creerlo pero ya lo comprove .adios
ResponderEliminarMe re copó tu blog.
ResponderEliminarAbrazo.
Gracias Specialneeds, me alegro que te haya gustado. Es un tema complejo, con el que muchas veces uno ya no sabe qué pensar...
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